Fjälltâg es su nombre, que aunque
suene a un repudio de sopa de letras, es el modo en el que se ha bautizado a la
nueva colección de textil de edición limitada IKEA. Y aunque os lo público con
un retraso de una semana, quería hablaros del evento que realizó en honor de
esta colección impronunciable el viernes pasado en la sección de textil.
Cerrado con cortinas para dar más
intimidad, pero posibilitando además a los clientes la vista de la presentación
por entre rendijas transparentes; los participantes del evento fueron los
socios de la IKEA Family, quienes pudieron inscribirse a través de la página web.
Con un éxito que ocupó las 50 plazas en menos de una semana.
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| La chica Com&In realizando la exposición con ayuda de unas diapositivas |
Y es que los creadores de estos
motivos curiosos buscaron sus ideas en el siglo 19 y 20, con la producción industrial;
el momento en el que se pasó de la artesanía a la revolución en masa, donde
dejamos nuestro pasado artesano para adentrarnos en la masificación de los
productos. Los textiles de esta colección están teñidos con pigmentos naturales,
y la mayoría de ellos recuerdan al trabajo pathwork
de nuestras abuelas, sobretodos las de aquellas colchas milenarias realizadas
con retazos y esmero.
Esta es una época en las que no
importa mezclar, ya que todos los colores y patrones se complementan, para dar
a conocer el momento de transición, la unión entre lo viejo y lo moderno. Las historias tras las imágenes también son
entretenidas y curiosas, como la de la mujer engalanada con sus joyas para
realizarse una foto anual, o la de las facturas de una florista de París. Dibujos
hechos a mano, fotografías vintages y
tejidos agradables como el algodón, el lino y el terciopelo hacen de esta
colección, una experiencia única.
En primicia para los socios de
IKEA Family, una exclusiva que como dijo la presentadora “os va a encantar”. Un
valioso regalo, que convierte los productos y las iniciativas en valiosos
recuerdos y experiencias para los socios Ikeas Family.
